Gotham, entre la luz y la oscuridad

El Pingüino y Jim Gordon, dos caras de una misma ciudad

Ya llevamos tres episodios de la nueva serie Gotham y la cosa está que arde. La serie nos muestra una Gotham anterior a la aparición de Batman. Concretamente nos situamos cronológicamente en los días posteriores al asesinato de los Wayne. Esos días son también los primeros de Jim Gordon en la ciudad desde hace mucho tiempo. Los primeros pasos de Gordon en la policía de Gotham los dará junto a su compañero, el detective Harvey Bullock.

Bullock es un policía decadente, como también lo es la ciudad de Gotham. Entiende el sistema que rige Gotham y no tiene reparos en admitirlo. Él está dentro del sistema. Va jugando su papel en la partida de unos jugadores mucho más importantes. Se cuida de tocar las narices a los grandes jefes mafiosos e incluso a los emergentes, como la seductora Fish Mooney. Se sirve de sus contactos en los bajos fondos y de un nada disimulado abuso de la autoridad para detener algunos maleantes, pero nada que pueda romper el equilibrio.  

Jim Gordon no sabe donde se ha metido

Jim Gordon no puede ser más distinto. Es un joven héroe de guerra que regresa a su ciudad cargado de ilusión para hacer el bien. Pronto se dará cuenta que en Gotham esto no es tan fácil. Gotham es sucia, está podrida por dentro y la corrupción reina por todas partes. Los más altos cargos están untados. Hasta el más importante personaje tiene su dosis de trapos sucios. Nada que hacer. La ciudad pide a gritos el golpe final que la libere de tanta podredumbre. Ante este escenario el bueno de Jim va a intentar hacer cumplir la ley. No va a ser tarea fácil ya que él es el único interesado en que esto ocurra. Sus primeros encuentros con los bajos fondos no pueden ser más interesantes. Cuando coincide con Fish Mooney en la misma sala la tensión se puede palpar en el ambiente. Gordon desprecia lo que hace la pujante jefa mafiosa mientras que esta sabe perfectamente que el recién llegado solo traerá problemas al orden preestablecido. Con Falcone la cosa no va mucho mejor. Su primer encuentro servirá para que el jefe mafioso interrumpa la ejecución de Gordon y Bullock por parte de los secuaces de Fish Mooney. No es la mejor manera de empezar en Gotham deberle la vida al hombre más poderoso de los bajos fondos.

Los duros inicios del camino al dominio de los bajos fondos

Y mientras esto sucede aparece otra pieza para el putrefacto engranaje de Gotham. Un joven Oswald Cobblepot trabaja a las órdenes de Fish Mooney. Inteligente y educado, Cobblepot empieza su carrera en el mundo del crímen. Su apariencia física y su forma de andar le han granjeado un mote nada agradable, el Pingüino. Cobblepot es un tipo ambicioso y esto le lleva a lanzar una jugada que no le sale demasiado bien. Su carrera como mente criminal sufre un fuerte revés al delatar a Fish Mooney y podría haber puesto punto y final a su aventura en Gotham si no fuera porque Jim Gordon decide darle una segunda oportunidad. Simula su asesinato ante su compañero Bullock, quien estaba ahí enviado por Falcone para asegurar la ejecución. Tira a Oswald al río justo después de decirle que desaparezca y no regrese jamás. En cierto modo Cobblepot le hace caso. Cuando regresa no puede decirse que sea la misma persona. En su viaje de ida y regreso se le ha despertado un sadismo y unas ansias homicidas que no había mostrado anteriormente, al menos a ese nivel.

Fish Mooney quiere escalar peldaños rápidamente

Así pues, entre toda la maraña de hilos planes y corrupciones varias que es Gotham dos historias de iniciación se entrecruzan. Una, la luminosa, es la de Jim Gordon. El joven policía quiere intentar limpiar en lo posible el departamento de policía o, al menos, reducir un poco el nivel de corrupción. Todo esto mientras sigue buscando al asesino de los Wayne. Una tarea nada fácil pues grandes sombras cubren al personaje que mueve los hilos del hombre que pulsó el gatillo. Por su parte, Cobblepot empieza su viaje hacia el trono de los bajos fondos. Drogas, prostitución, extorsión, sobornos y robos son elementos que entiende y quiere dominar. Sus primeros pasos consisten en acercarse a la familia Maroni. La mejor manera de construir un imperio es sobre las cenizas del anterior. Si consigue romper los equilibrios reinantes entre Falcone, Maroni y Fish Mooney conseguirá la guerra que va prediciendo. Gotham será más peligrosa que nunca y en este escenario es donde un hombre inteligente como él puede sacar a relucir todo su potencial.

Gordon y el Pingüino. El Pingüino y Gordon. La lucha entre la luz y la oscuridad. Dos Hombres que empiezan a recorrer sus caminos en una ciudad que marcará a fuego el destino de ambos. Es su casa pero la entienden de diferente forma. Tienen visiones opuestas de cómo debería ser y esto les llevará a un inevitable enfrentamiento. Gotham está más interesante que nunca y mientras asistimos perplejos al espectáculo que ambos bandos nos ofrecen, si nos fijamos, podremos descubrir el nacimiento de los futuros dementes que camparán por el Asilo Arkham más pronto que tarde. La pequeña Ivy ya odia a Gordon. Nigma es tan intrigante y extraño que asusta. ¡Esto es Gotham, señores! El caldo de cultivo ideal para los criminales más surrealistas a la vez que peligrosos.